REUNIÓN EN PALAZUELOS DE ERESMA

Una vez más ACMET busca espacios y puntos de encuentro, esta vez en Palazuelos de Eresmas, Invitados por GIU (Ganaderos Ibéricos Unidos) representados por Noemí del Campo, Rubén Valín (socio de ACMET), Arsenio Rodríguez y Juan Antonio García, también socio de ACMET, y acompañados por otros organismos como El Colectivo Azalvaro, cuyo fin es la protección y conservación de las aves carroñeras y sus hábitats, el Grupo de Rehabilitación de la Fauna Autóctona y su Hábitat ( GREFA), la Fundación Oso Pardo, WWF-ADENA, representantes políticos, investigadores y docentes así como representantes y profesionales de materias primas procedentes del sector primario como la lana y otros productos en cuyo proceso de producción las buenas prácticas son fundamentales y se deben diferenciar pues colaboran de manera esencial a la sostenibilidad del medio natural. ACMET

En este sentido el debate con Consultores especialistas en Marcas fue muy interesante.

El desarrollo rural sostenible, la educación y pedagogía de una sociedad que a veces parece olvidar lo importante que es que la ordenación de los territorios se apoye en las tradiciones y prácticas que hacen sostenible el medio hacen que se puedan compartir espacios y objetivos y de esta forma enriquecer las propuestas sumar voluntades y empatizar, buscando sinergias, que hacen que lo complicado, el camino es duro y largo, a veces resulte al menos llevadero e ilusionante.

La dificultad en la coexistencia entre ganadería extensiva y grandes carnívoros pero la aceptación de na necesidad de hacerlo viable nos llevó a través del dialogo a considerar otra serie de problemas que realmente son más lesivos para este colectivo, en este sentido nuestro proyecto tiene cabida como es lógico, no solo bajo el aspecto de procurar que la raza goce de una salud y una funcionalidad que la hagan ser lo que siempre fue, una herramienta de primer orden no solo en la protección de los rebaños sino también en la conservación de los grandes carnívoros. En este sentido nuestra función, como Asociación, tiene una vigencia y una actualidad extraordinaria pues, como se apuntó, muchos territorios afrontan la aparición del lobo como una novedad y el trabajo de concienciación de que la coexistencia no solo es posible sino deseable es una labor que nos corresponde a todos, a ganaderos con la experiencia que les avala, a representantes de organismos conservacionistas y como no también a ACMET.

Desde ACMET agradecemos a GIU que nos incluya en este grupo del cual destacaría su afán de trabajo y la voluntad de hacer las cosas con sentido común, con dialogo y aunando experiencias, al resto de invitados también agradecerles la atención y poder, junto con nuestras propuestas, formar parte de un proyecto tan ambicioso.

Gracias por todo